6 consejos para elegir una cuna de bebé

Sabemos que la llegada de un bebé, revoluciona la vida a todos. Tanto a los futuros papás, como a toda la gente que tienen a su alrededor. De repente, todos quieren colaborar en las compras de cosas para el bebé, todo el mundo opina, y todo el mundo quiere meterse en las cosas más íntimas.

Por eso, antes de que nazca tu bebé es primordial pararte a pensar en muchas cosas que vas a necesitar, para así acertar en tus compras, que la cosa no está para tirar el dinero. Hoy en Muebles Gascón te queremos hablar de la cuna, y todos los complementos de su alrededor: cuál se debe comprar para sus primeros meses de nacimiento, el colchón, la ropa, dónde colocarla…

Son preguntas que nos hacemos frecuentemente y que hoy en nuestro blog vamos a tratar de resolver. Por ello, os explicamos seis consejos que debes seguir a la hora de elegir una cuna de bebé.

El primer paso: Mini cunas

Recién salidos del vientre de la madre, los bebés necesitan sentirse plenamente cómodos y bien acurrucados, como si aún siguiesen en la tripa. Por eso, durante los primeros meses de nacimiento, la mejor elección serán las mini cunas. Resultan muy prácticas ya que son muy ligeras, se mueven con facilidad y son ideales para colocarlas en tu dormitorio. Ten también en cuenta que el colchón debe ser duro, hecho con tejidos de algodón, ya que el bebé no puede hundirse en el centro. También puedes añadirle a tu cuna catre ruedas o patas con forma de balancín para que te resulte más cómodo mecer al bebé.

Cuando crecen…

Tras haber pasado 4 o 6 meses durmiendo en la cama moisés, tu bebé va a necesitar una cuna más grande. Allí dormirá hasta los 3 años, por ello es importante encontrarle una cama que se adapte a sus necesidades. Unas pautas generales para escoger la cuna son:

El somier debe tener una altura interior de 30 centímetros en la posición más alta y 60 centímetros en la más baja.
En caso de que la cama tenga barrotes, debe haber una separación entre ellos de hasta 6.6 centímetros y una altura de 50 cm.
El barniz y la pintura debe ser atóxica.
Los embellecedores deben ser lo suficientemente grandes para que el niño no los arranque.
Para evitar accidentes, si tu bebé ya sabe ponerse de rodillas o sentarse, coloca el colchón a la altura más baja de la cama.
Si la cuna tiene ruedas, al menos dos de ellas deben tener freno incorporado.
La distancia entre el colchón y los bordes de la cuna no debe superar los 2 cm a cada lado.

Tipos de cunas:

1- Cuna clásica

Si te gustan los diseños clásicos, elige la cuna hecha de madera y que tenga barrotes. Suelen tener dos niveles de altura del colchón y tu bebé puede usarla hasta los dos años aproximadamente. Sus medidas más habituales son: 80 cm X 120 o 140 cm de largo.

2- Cuna convertible

Este tipo de cuna te da la opción de desmotar las barandillas, de manera que en un futuro, cuando tu bebé sea más mayor, puedes utilizarla de cama. Además, suelen contener cajoneras, estantes y un cambiador para poder incorporar todos los objetos básicos para tu hijo. Aunque suelen ser más costosas que las camas clásicas, son muy prácticas por sus múltiples funciones.

3- Cuna de viaje

Esta es probablemente la cuna más flexible de toda la variedad: son plegables, ligeras y ocupan muy poco espacio, lo que las hace ideales para viajar o trasladar a tu bebé de un lado a otro. También son útiles por si tu bebé tiene que quedarse ahí un rato jugando, tipo corralito, de manera que este puede no solo dormir, sino también jugar. Algunas incluyen hasta un cambiador desmontable y dos niveles donde situar el colchón.

El colchón de la cuna

El colchón es uno de los accesorios más importantes de las cunas, ya que de este dependerá que tu bebé descanse mejor o peor. Para ello, te aconsejamos que sigas las siguientes pautas:

Elige el colchón duro para que tu bebé no se hunda en el centro. Retírale también el plástico que lo envuelve para evitar accidentes.
Puedes utilizar un protector de colchón, aunque este debe ir perfectamente ajustado.
El colchón debe ajustarse perfectamente a la cuna para que tu bebé no pueda meter la mano entre los huecos.

La ropa de cuna

La ropa de cuna es otro elemento indispensable en tu mobiliario infantil, por ello, debes tenerlo en cuenta:

Utiliza tejidos suaves y transpirables como el algodón o el lino.
No utilices edredones hasta que el bebé no haya cumplido un año. Para ello, basta con usar una sábana bajera, una superior y una mantita.
Los pijamas-saco son la mejor opción para los primeros meses de vida de tu bebé, ya que este podrá moverse con total libertad sin destaparse.

Cómo colocar la cuna

En primer lugar, no coloques la cuna pegada a la ventana, ya que podría colarse frío y dañar a tu bebé. Tampoco la coloques muy cerca del radiador, ya que un excesivo calor también podría ser peligroso. Ten en cuenta también los objetos que colocas cerca de la cuna, ya que el bebé podría cogerlo y hacerse daño. Por último, coloca el somier en la posición más baja para evitar que salte por encima de los barrotes.

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